Según datos recientes de Strategie Grains, la producción de trigo blando 2024/25 en la Unión Europea se sitúa en el nivel más bajo de los últimos años, tras ajustar la previsión de cosecha a 116,5 mill de toneladas, por debajo de los 122,3 millones de toneladas estimados en julio.
Este ajuste se debe, entre otros factores, a las malas perspectivas de cosecha en Francia, principal productor de la UE,afectado por las altas precipitaciones en el desenlace del cultivo.
La Asociación Ucraniana de Granos estimó la producción de trigo para la campaña 2024/25 en 19,8 millones de toneladas, una cifra inferior a los 22 millones de toneladas de la cosecha 2023/24.
Esta disminución se debe a las altas temperaturas y a la sequía experimentada durante el desarrollo del cultivo, que afectó su rendimiento.
En los primeros siete meses del ciclo comercial de trigo 2023/24 la demanda acumuló 9,5 millones de toneladas; 3,5 millones de toneladas por encima de la campaña anterior, pero 2,6 millones de toneladas por debajo del promedio histórico para el mismo periodo.
Con una baja en la producción en las últimas campañas, el ajuste recae sobre las exportaciones, priorizando el consumo interno. Es así que, las exportaciones cayeron un 30% para este período, mientras que la molienda se mantuvo dentro de los parámetros normales, acumulando, en promedio, 3,4 millones de toneladas.
La siembra del trigo 2024/25 culminó con una estimación de producción de 18,1 millones de toneladas. Las últimas lluvias registradas provocaron una mejora en la condición del cultivo normal/bueno de 5,7p.p.
Tanto la industria como la exportación comprometieron 2,4 millones de toneladas, de los cuales el 73% tiene precio.