¿De qué hablamos cuando hablamos de sostenibilidad? Del discurso a la acción
Qué se entiende por sostenibilidad, según Martín Ginart, responsable del área ambiental de la región CREA Oeste Arenoso y experto en Gestión Ambiental CREA.
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El concepto de Sostenibilidad está muy difundido en términos discursivos, pero en el ámbito CREA se vienen realizando esfuerzos importantes, como es el caso de la Gestión Ambiental CREA (GAC), para poder relevar y monitorear indicadores concretos relativos a esa materia.
“Una definición que me gusta de sistemas agrícolas sostenibles es la de Gabriel Vázquez Amabile: satisfacer nuestras necesidades sin comprometer las posibilidades de las generaciones futuras de satisfacer las suyas”, indicó Martín Ginart, responsable técnico del área ambiental de la región CREA Oeste Arenoso y pionero en el uso de la Gestión Ambiental CREA (GAC), durante una charla ofrecida en una jornada técnica organizada por la regiones CREA Oeste y Oeste Arenoso en la sede de la Sociedad Rural de Trenque Lauquen.
El experto remarcó que existen muchas prácticas ambientalmente óptimas que correlacionan con las mayores eficiencias productivas y los mejores resultados económicos en empresas agropecuarias.
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Correlación entre impacto ambiental (EIQ) y gasto total en fitosanitarios (u$s/ha) en el cultivo de soja. Grupo Quemú (región Oeste Arenoso). Campaña 2024/25
“Propongo que cambiemos el período de análisis de las distintas prácticas que llevamos adelante y pasemos de una campaña a analizar varias de manera consecutiva, porque así podremos visualizar la correlación positiva entre la rentabilidad y una adecuada gestión ambiental”, expuso Martín.
“Sistemas con un balance positivo de nutrientes, intensificación de la rotación agrícola, tecnologías de aplicaciones selectivas de herbicidas y promoción de la biodiversidad –entre otros ítems– contribuyen a sostener las bases productivas de las empresas y el resultado económico”, remarcó.
El técnico CREA resaltó que con el modelo de la agricultura basada en insumos –que fue muy exitoso– se consiguió incrementar la productividad de manera notable a la vez que reducir la erosión de los suelos y eficientizar el uso del agua, entre otros logros.
Sin embargo –dijo–, estamos en un punto de inflexión y debemos preguntarnos si podemos seguir haciendo agricultura cómo la veníamos realizando en las últimas dos décadas. “El desafío que tenemos por delante es copiar a la naturaleza y ganar plata”, sostuvo.
Al respecto, los ensayos de largo plazo llevados a cabo en la región evidencian mejores resultados económico con sistema de reposición de nutrientes. Los cultivos de cobertura o servicio, en tanto, permiten reducir la presión de malezas, disminuir el uso de fertilizantes, consumir excesos hídricos y promover una mayor actividad biológica en los suelos. No existe, sin embargo, una receta única al respecto. En los años secos la gestión de la napa debe realizarse con cuidado para no comprometer la viabilidad de los cultivos de renta.
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Cultivo de servicio
“Las investigaciones al respecto muestran, de todas maneras, que el índice de uso del suelo de 150 a 170 días por año permite mantener niveles de Materia Orgánica adecuados”, comentó Martín.
Otro factor clave para contar con sistemas sostenibles es la promoción de una elevada diversidad biológica, ya sea incorporando varias especies en la rotación agrícola como incentivándola en determinados sectores específicos. “Seguramente tenemos ambientes que nos dan pérdidas económicas poniéndolos en producción; podemos con ellos generar valor al promover la biodiversidad, lo que contribuye a generar mejores resultados, además de crear un activo paisajístico y eventualmente también recreativo”, apuntó.
Los fitosanitarios y fertilizantes son indispensable para la producción, pero por medio de tecnologías de proceso y equipamiento es factible reducir su uso. “En una empresa que siembra una superficie importante en la zona, sólo con tecnologías de proceso logramos reducir entre el 30% y 40% el uso de herbicidas e insecticidas”, informó.
“La sostenibilidad no se logra con acciones aisladas, sino con un sistema productivo que contemple todas las dimensiones de manera simultánea y con un horizonte de largo plazo”, resumió Martín.