Tesis de grado para resolver dudas agronómicas en el CREA Henderson Daireaux
Empresas integrantes del CREA Henderson Daireaux incorporaron maní en la rotación y están investigando el impacto del cultivo en la rotación con la ayuda de estudiantes de la Fauba.
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Empresas integrantes del CREA Henderson Daireaux (región Oeste) incorporaron maní en la rotación y, si bien el cultivo representa una oportunidad para diversificar la matriz comercial agrícola, surgieron dudas sobre el impacto agronómico de la oleaginosa.
Se trata de una cuestión que enciende debates suculentos en diferentes ámbitos agrícolas, pero sobre la cual no existe mucha información al respecto, por lo que en el CREA Henderson Daireaux decidieron buscar aliados para generar información en la materia.
“Nos contactamos con Jornaderos Agro y, a través de ellos, realizamos un convenio con la Facultad de Agronomía de la UBA (Fauba) por medio del cual alumnos están llevando a cabo dos tesis de grado sobre el impacto del maní en la rotación agrícola”, comenta Agustín Barattini, asesor del CREA Henderson Daireaux.
Una de las tesis contempla realizar mediciones de propiedades físicas y químicas de suelos de lotes que incorporaron maní recientemente (campañas 2023/24 y 2024/25) para comparar, en condiciones equivalentes, las variables edáficas de rotaciones similares con ausencia de maní.
Otra tesis de grado consiste en estudiar un lote con historia de maní (campaña 2020/21) con el propósito de reconstruir la secuencia de rotaciones y compararla con lotes equivalentes con ausencia de maní, de manera tal de evaluar el impacto posterior de distintos esquemas de intensificación agrícola.
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En ambos casos las tesis –coordinadas por Carina Álvarez– están analizando calidad estructural (método de la prueba de caída), densidad aparente, resistencia mecánica, infiltración, porcentaje de cobertura y estabilidad estructural (método de Le Bissonnais), pH, conductividad eléctrica, carbono orgánico, fósforo (P Bray) y nitrógeno anaeróbico (NAN).
“Con estas iniciativas los estudiantes de agronomía tienen la posibilidad de generar conocimiento trabajando en el campo, al tiempo que resuelven una inquietud agronómica producida por la introducción de un nuevo cultivo”, explica Agustín.
La experiencia resultó tan satisfactoria que posteriormente se instrumentaron convenios para realizar dos proyectos más –coordinados por José Andrade– sobre brechas de rendimiento en el cultivo de maíz en diferentes ambientes de la zona de influencia del CREA Henderson Daireaux. Para eso se valerán de los aprendizajes logrados en el último año con la plataforma Terradot, con la cual validaron un modelo de simulacion (APSIN) para identificar potenciales de rendimiento por ambientes en función de la detección de brechas agronómicas.
Además, se conformó un grupo liderado por Juan Martín Capelle e integrado por los técnicos Juan Pablo Monzón, Diego Rottilli y Josefina Lacassa, el cual tiene a su cargo la determinación de temas posibles por investigar en la región CREA Oeste en el marco de acuerdos con la Fauba.
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Estudiantes de la Fauba integrantes de Jornaderos Agro en campos del CREA Henderson Daireaux
“Es tan extensa y grande la cantidad de aspectos que abarcan las empresas agropecuarias en la actualidad que si comenzamos a sumar proyectos por cuenta propia lo más probable es que no exista tiempo suficiente para encararlos de manera apropiada”, señala Agustín.
“La ventaja de trabajar en la red CREA es que podemos vincularnos con otras instituciones, en este caso la Fauba, que necesita vehiculizar la generación de conocimiento para producir tesis de grado; así creamos un entorno colaboratorio en el cual ganamos todos: empresas, investigadores y estudiantes”, agrega.
En lo que respecta al cultivo de maní, si bien tradicionalmente se sembró en la provincia de Córdoba, en la última década las empresas dedicadas a ese producto comenzaron a expandirse hacia La Pampa, Buenos Aires y Santa Fe.
“El maní se realiza bajo siembra directa, aunque en algunos casos fue necesario roturar el suelo porque el volumen de cobertura era demasiado grande; la clave de las buenas prácticas asociadas al cultivo reside en contar con una gramínea como antecesor y en sembrar otra gramínea apenas cosechado el maní, ya sea trigo, cebada o maíz de segunda”, resume.