En Santa Isabel Agro tenían el desafío de mejorar la eficiencia de un sistema de cría vacuna con alta carga animal en un ambiente con recursos forrajeros escasos (norte de Entre Ríos). Decidieron entonces poner el foco en la eficiencia reproductiva, pero para ello necesitaban información clave generada a través de la identificación electrónica individual.
“No vemos otra manera de transitar este proceso sin el manejo individual de los animales”, comentó Irene Calafell de Santa Isabel Agro, empresa integrante del CREA La Paz, durante un evento en formato virtual organizado este martes por la región CREA Litoral Sur.
La implementación del sistema comenzó en el tacto del año 2021 con la incorporación de chips a todo el rodeo de madres para realizar una carga inicial de datos (edad, estado corporal, reproductivo, sanitario, etcétera) con un bastón lector.
Durante la parición se caravaneó también a los terneros recién nacidos y se los pesó y vinculó con sus respectivas madres. La tercera etapa consintió en la transformación de la balanza tradicional en otra electrónica –con lector de caravanas incorporado– para agilizar el proceso de toma de registros.
Si bien el rodeo de base era Hereford, empezaron a sumar genética Angus y Limangus para incorporar mejoras orientadas a promover atribuciones reproductivas y maternales.
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Identificación electrónica bovina. Lectura de caravanas electrónicas con bastón.
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“Cada vez que los vientres pasan por la manga, cualquiera sea el motivo, se pesan y se reevalúan corporalmente. Toda información generada se guarda en el bastón en tiempo real y de esta manera se lleva un registro de toda la historia de cada vaca en términos reproductivos, de estado corporal y sanitario”, explicó Irene.
Los registros se cargan en una planilla Excel y cada variable de interés es vinculada a una clave numérica asociada a cada vientre para poder hacer un seguimiento individual de los diferentes registros del ejemplar, como puede ser el caso de las ganancias de peso de los terneros al pie de la madre.
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Identificación electrónica bovina. Esquema de datos recabados.
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“El principal uso concreto de la tecnología en nuestro caso es la selección de vientres por descartar, así como también la selección de las vaquillas y de los toritos para reposición”, comentó.
“Al contar con el dato del peso al nacer, podemos ir pesando mes tras mes los terneros al pie de la madre y seleccionar así por habilidad materna, dado que es un criterio esencial para nuestro sistema productivo”, añadió.
Al llevar registros individuales, una de las sorpresas fue detectar la enorme variabilidad genética presente en el rodeo y el potencial que pasó a tener la selección con información apropiada en tiempo y forma.
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Identificación electrónica bovina. Variabilidad de ganancia diaria de peso vivo entre el nacimiento y el destete en kg/día
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Si bien la tecnología se incorporó con fines reproductivos, también generó valor en el área comercial al eficientizar la planificación de las ventas y ordenar con mayor precisión el armado de las tropas.
“Es algo sumamente útil poder proyectar la tropa sabiendo la ganancia diaria que viene teniendo el rodeo, animal por animal, de manera tal de ir proyectando la próxima venta con anticipación”, apuntó Irene.
“Por otra parte, podemos enviarle una imagen del monitor al comprador con la distribución de los pesajes para que él acepte lo enviado o eventualmente solicite retirar algunos animales que se alejan de sus pretensiones”, agregó.
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Identificación electrónica bovina. Monitor.
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Es decir: la información es clave para poder mejorar de manera notable la experiencia del cliente, dado que permite visualizar con datos objetivos lo que realmente está comprando.
“Nuestra experiencia positiva: consideramos que el manejo individual es algo imprescindible para nosotros y hoy no nos imaginamos haciéndolo de otra manera”, resume
Las mayores dificultades en la materia se registran al no haber un programa que permita sistematizar y automatizar los datos, tarea que requiere muchas horas y no está exenta de errores humanos al tener que gestionar un volumen enorme de registros de manera artesanal.
La buena noticia es que el equipo técnico del área de Ganadería de CREA está trabajando en el diseño de un programa orientado a automatizar ese proceso para, con un mismo conjunto de datos, confeccionar diferentes análisis automatizados que permitan agregar valor en la toma de decisiones empresarias. El programa está siendo probado para ser lanzando próximamente en el ámbito de la red CREA.