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SUSCRIBITEGanadería argentina hoy: se presentó en la Mesa Técnica Ganadera CREA una actualización de las principales variables del negocio cárnico.
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SUSCRIBITEGanadería argentina: si bien los fundamentos intrínsecos al negocio ganadero son estructuralmente sólidos, el impacto de la nueva política cambiaria implementada por el gobierno nacional introduce un factor de incertidumbre. El proceso de apreciación real del tipo de cambio seguirá comprometiendo la competitividad del sector exportador, aunque favorecería en lo inmediato la capacidad de consumo interno.
Todo esto, siempre y cuando el nuevo esquema cambiario no afecte el nivel de actividad económica.
Al respecto, el área de Economía de CREA realizó una proyección de escenarios macroeconómicos.
“Si bien las exportaciones argentinas de carne cayeron en volumen en lo que va del presente año, la facturación del negocio no se resintió tanto debido a un aumento de los precios de exportación con destino a China, Israel, Unión Europea y EE.UU.”, comentó Pilar Sayaguez del área de Ganadería de CREA al presentar este martes en la Mesa Técnica Ganadera una actualización de las principales variables del negocio.
EE.UU., además de tener precios poco competitivos, enfrenta restricciones comerciales derivadas de las políticas proteccionistas implementadas por la gestión del presidente Donald Trump, lo que contribuyó a afirmar los precios internacionales de la carne vacuna exportada por las naciones que integran el Mercosur.
Los niveles de faena bovina en la Argentina se encuentran por debajo de los presentes tanto en 2024. Si bien arrancaron elevados en los primeros dos meses del año, en marzo pasado se desaceleraron.
En tanto, los últimos datos disponibles del índice de reposición de corrales provistos por la Cámara Argentina de Feedlots muestran niveles que, si bien son superiores al promedio de la última década, están por debajo de los registrados en 2024.
El consumo interno de proteínas cárnicas en el mercado argentino se recuperó en lo que va del año luego de la importante caída registrada en el primer tramo de 2024 como producto del cambio de orden macroeconómico.
Si bien la relación carne vacuna/salario mínimo sigue en niveles históricos bajos (debido especialmente al aumento del precio de los cortes bovinos), la preferencia cultural del producto por parte de los consumidores argentinos permite sostener la demanda interna.
“En ese marco, los precios de la hacienda liviana con destino al mercado interno medidos en pesos constantes se vienen recuperando, aunque están lejos de los máximos recientes registrados en 2022”, señaló Pilar.
“No es el caso de los valores de la vaca buena, que muestra precios más estables”, añadió. En este caso, los derechos de exportación vigentes sobre la carne vacuna (6,7%) y la apreciación cambiaria conspiran contra la capacidad de pago del sector exportador.
Por otra parte, la necesidad de reducir carga animal en zonas de cría afectadas por problemas climáticos en el último ciclo contribuyó a incrementar la disponibilidad de vacas para el sector exportador.
La apreciación del tipo de cambio, sin embargo, resulta favorable al momento de medir el valor de la hacienda en dólares, lo que permite obtener relaciones insumo/producto atractivas en términos históricos con respecto a combustibles, fertilizantes, maíz y balanceados, entre otros ítems.