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SUSCRIBITEEvaluación de brechas de rendimiento en trigo en la región CREA Sudoeste por macro y micronutrientes, densidad y genética.
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SUSCRIBITEEn la producción de cultivos extensivos, uno de los desafíos presentes en toda la historia de la red CREA fue reducir las brechas entre los rendimientos logrados con los rendimientos que podrían alcanzarse bajo ciertos límites de eficiencia productiva, económica y ambiental, para de esa manera lograr que el incremento de la producción sea sostenible en el tiempo.
En ese marco, la región CREA Sudoeste implementó una línea de trabajo orientada a cuantificar dicha brecha mediante la comparación del manejo actual versus otro en ele cual el uso de insumos (fertilizantes, semillas y fitosanitarios) no sean limitantes. Por otra parte, se propone establecer una fracción de dicha brecha a distintos factores de manejo
“Los rendimientos alcanzables sin limitaciones por un uso de insumos subóptimo en las condiciones ambientales del sudoeste bonaerense fueron caracterizados para comprender las brechas de producción que el manejo actual del cultivo de trigo propone”, apunta Agustín Giorno, coordinador técnico de Agricultura de la región CREA Sudoeste.
Para determinar el efecto de cada una de las variables evaluadas, se realizaron parcelas en donde uno de los factores se ofrece emulando el manejo habitual del campo, mientras que todos los demás (macro y micronutrientes, densidad y genética) se gestionan “sin limitaciones”. Las características de los ensayos pueden verse a continuación.
La comparación entre el rendimiento obtenido mediante el manejo habitual y el realizado “sin limitaciones” se establece como la “brecha total de rendimiento”.
En las tres localidades analizadas –Pigué, La Colina y Gral. La Madrid– se encontraron rendimientos alcanzables contrastantes en un rango de 4100 a 7500 kg/ha que no se correlacionaron con el potencial del ambiente. La máxima brecha se exploró en el ambiente intermedio (Gral. Lamadrid: 2275 kg/ha).
En los tres sitios se registraron brechas de rendimiento explicadas por la dotación de nitrógeno, fósforo y azufre, las cuales variaron entre 340 y 1097 kg/ha. La elección del mejor cultivar para el ambiente en cuestión y la campaña en un manejo “sin limitaciones” también mostró diferencias de entre 334 y 612 kg/ha.
En tanto, el manejo sanitario y la densidad de siembra sólo influyeron en casos puntuales, mientras que la dotación de micronutrientes no explicó brechas de rendimiento en ninguna de las localidades.
“Estos experimentos nos mostraron que bajo un manejo sin limitaciones por insumos podemos explicar un rendimiento alcanzable superior al manejo actual”, comentó Agustín.
“Dependiendo de la localidad, la brecha varió entre 15 y 40%. Y los factores que explicaron en mayor medida esta brecha fueron la dotación de macronutrientes y la elección del cultivar”, resumió.