La inclusión de cultivos de servicios en la rotación se presenta como una alternativa que permite aumentar la captura y eficiencia de los recursos en el norte de Buenos Aires. Es por ello que, además de trabajar en secuencias de rotación intensificadas y en sus efectos a mediano plazo, se analiza el impacto a corto plazo de los cultivos de servicios sobre distintas propiedades del sistema de producción. Uno de ellos, el impacto sobre las malezas, especialmente las de difícil control en la zona.
El proceso de intensificación agrícola que sufrió la región pampeana en los últimos años estuvo dominado por la expansión del cultivo de soja en el marco de un sistema simple, generalista y eficiente, que se consolidó como el modelo dominante en los sistemas productivos de todas las regiones del país. Este proceso tuvo efectos negativos sobre la producción de materia seca, el contenido de materia orgánica, la degradación y pérdida de los suelos, el ascenso de napas y también sobre otros factores sensibles para la producción, como la pérdida de efectividad de tecnologías contra las adversidades bióticas.
En la región CREA Norte de Buenos Aires se viene trabajando desde hace 14 años en líneas de largo plazo que buscan intensificar la secuencia de la rotación de la mano de cultivos de renta. Esta línea de trabajo se sustenta sobre la idea de intensificar el uso de la tierra, secuenciando un mayor número de cultivos diversos por unidad de tiempo. De este modo, se procura incrementar la productividad de los sistemas de cultivo mediante la captura de una mayor proporción de los recursos disponibles y un uso más eficiente, aumentando el aporte de carbono al sistema mejorando las propiedades físicas y químicas asociadas.
Por otra parte, cultivos que también prestan servicios ecosistémicos pero que no tienen finalidad de renta -los denominados cultivos de servicios- cumplen también estas funciones, mejorando, incluso, alguno de los atributos ecológicos buscados. Su inclusión en la rotación se presenta como una alternativa para aumentar la captura y eficiencia en el uso de los recursos, que permite reducir las pérdidas de energía, agua y nutrientes en los agroecosistemas, aportando carbono aéreo y subterráneo para mejorar MOS en sus fracciones, nutrientes como nitrógeno a partir de la FBN, mejoras en propiedades físicas del suelo y mejoras en el control de malezas reduciendo el uso de controles e insumos de síntesis química.
También se presentan como recursos forrajeros (verdeos de servicio) en la medida que se manejen y aprovechen racionalmente. Consideramos que, los CR y los CS son dos maneras válidas, necesarias y no excluyentes de intensificar el uso de los recursos en nuestros sistemas de producción para la zona norte de Bs.As. En este sentido, pueden ser complementarios en el tiempo para rediseñar los modelos productivos actuales.
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Cultivos de servicio como herramienta de producción en el Norte de Buenos Aires.pdf
Cultivos de servicios como herramienta de producción