La agricultura de precisión se basa en un conjunto de herramientas tanto físicas como digitales dirigidas a implementar esquemas de producción sitioespecíficos. Estos esquemas flexibles tienen la ventaja de posibilitar mejoras en los rendimientos a campo, al tiempo que reducen la necesidad de insumos productivos, favoreciendo un ahorro de costos con un menor impacto ambiental. En el presente informe, elaborado por las áreas de Economía y Empresa de CREA, junto con el área de Gestión Empresarial de AZ Group se consideran las ventajas de la siembra de precisión.
Los datos del Censo CREA 2019 revelaron que los integrantes del Movimiento ya habían iniciado el proceso de adopción de estas tecnologías. Aunque con notable dispersión de acuerdo a la región de que se trate, el manejo por lotes pierde terreno frente a alternativas como el manejo con dosificación variable o por macroambientes. A nivel superficie, la practica más extendida es el mapeo de rendimiento, mientras que la aplicación variable de semillas y fertilizantes alcanzó el 8,5 y 10,6% de la superficie en producción, respectivamente
Factores de rendimiento
Si se analizan las variables de mayor incidencia en el rendimiento de un cultivo, se advierte que, luego de la disponibilidad de nutrientes, los factores de más peso en la determinación de los kilos por hectárea a obtener se determinan en el momento de la implantación.
La emergencia uniforme en el tiempo de las plántulas se encuentra asociada a la uniformidad en la profundidad de todas las semillas. En este sentido, el concepto de singulación refiere a la capacidad del distribuidor de semillas para entregar siempre una sola, a bajas y altas RPM, mientras que la distribución remite a la uniformidad en el distanciamiento entre semillas.
Tanto la emergencia como la singulación dependen estrechamente del trabajo que efectúe el cuerpo de siembra. No sólo influye el dosificador, sino también el tubo de bajada copiando el terreno y la compactación de las paredes del surco.
En este sentido, los dosificadores neumáticos, ahora accionados por motores eléctricos, permiten variar la dosis surco por surco y detener la descarga de semillas ante la superposición de una hilera con una pasada anterior o cabecera. Al mismo tiempo, pueden compensar el diferencial de espacio recorrido por cada uno de los cuerpos en las curvas, mejorando la distribución espacial de las plantas.
Los sistemas estabilizadores del cuerpo de siembra, por su parte, tienen como objetivo controlar las oscilaciones y ejercer una presión constante sobre los distintos terrenos a sembrar. De este modo, se garantiza que el depósito de la semilla en el fondo del surco se realice en forma homogénea, tanto en distancia como en profundidad. Además, se limita la compactación en el surco favoreciendo el posterior desarrollo radicular de la plántula.
La carga o peso vertical del cuerpo define la ubicación final de la semilla. Si es leve, el cuerpo rebota, le cuesta clavar y deja algunas semillas fuera del surco. Si, en cambio, la carga es muy elevada, según la condición del suelo podrá profundizar en exceso y tenderá a compactar las paredes del surco con las ruedas limitadoras de profundidad. Por este motivo, la carga debe ajustarse según la capacidad portante del suelo.
Mediante un compresor de aire y un acumulador se regula y se mantiene constante la presión del aire que, a su vez, transmite la fuerza vertical sobre el cuerpo sembrador. A diferencia de lo que ocurre cuando la fuerza se transmite con un resorte, al ser constante la presión independientemente de la variación de la posición vertical del cuerpo por las irregularidades del terreno, la fuerza vertical será siempre la misma. Existen modelos puramente neumáticos y otros hidroneumáticos.
